Un banco de trabajo bien organizado:
Tanto si es aficionado al bricolaje como si por motivos laborales utiliza un banco de trabajo, sabrá que la clave para que se puedan realizar las diferentes labores que se desarrollan en él de una forma rápida y eficiente está en la buena organización. Un banco de trabajo ordenado y bien organizado facilita mucho las cosas ya que no habrá que perder el tiempo buscando las distintas herramientas o librando espacio a medida que vamos avanzando en la tarea.
Para conseguir un banco de trabajo bien organizado hay que tener en cuenta diferentes aspectos del mismo:
- El tamaño : no es lo mismo un banco de trabajo para colocar en el garaje de casa y hacer una chapucilla de vez en cuando que un banco profesional. Cada función tiene unas necesidades y no siempre lo más grande es lo mejor. Si tenemos pocas herramientas y no usamos el banco de trabajo a diario, lo mejor es uno más pequeño que no nos ocupe demasiado espacio y que nos permita tener todo fácilmente a la vista. Si se trata de realizar tareas más profesionales, necesitaremos que haya una zona para almacenaje y/ o para colgar herramientas que ofrezca cabida para todo el material a utilizar.
- El peso : tampoco da igual trabajar con piezas de poco peso que hacerlo con otras más voluminosas o de materiales más pesados. Existen bancos de trabajo para grandes cargas mucho más robustos y realizados en chapa de acero capaces de soportar pesos mucho mayores que los bancos convencionales.
- La forma : mientras que unas personas prefieren un panel tras la mesa del banco de trabajo para colgar las herramientas, otras prefieren bancos de trabajo con cajones extraíbles. Por supuesto, otros no querrán tener que elegir y preferirán contar con ambas opciones. Todo en la mesa debe de ser personalizable, incluido también el número de estantes inferiores. Para esto existe la posibilidad de adquirir uno o dos estantes extras para adaptarse a las diferentes necesidades del trabajador.
- El trabajo : los trabajos para los que se necesita más fuerza bruta, como serrar o martillar se realizan habitualmente de pie, pero otro tipo de tareas en las que se utiliza la concentración o la precisión se pueden realizar más cómodamente sentados. Es importante que el taburete para el banco de trabajo, ya sea con o sin respaldo, sea muy cómodo y se pueda regular en altura para evitar malas posturas que pueden derivar en dolorosos problemas de espalda.